Los Pozos de HUNOSA disponen de una red de distribución de nitrógeno en su interior, para enfriar las capas de carbón, que permitiría acondicionar almacenes a -70ºC para la vacuna del COVID-19.
Un almacén estratégico de material sanitario y medicamentos, en un pozu mineru, podría ofrecer las condiciones de estabilidad necesarias para albergar las futuras vacunas frente al COVID-19.