Dos trabajadores de Dupont fueron sancionados con tres días, al ser observados por el director de las fábricas de Nomex e ICL, puntualmente sin la mascarilla de protección frente al COVID.
Si bien es cierto que el uso de mascarilla es obligatorio en los espacios comunes, el hecho, no pasa de ser un descuido puntual, y la actitud de los trabajadores siempre fue de colaboración inmediata, remediando al momento la situación. Estos trabajadores que ya tienen una larga carrera profesional nunca habían sido apercibidos por faltas de seguridad.
El SOMA-FITAG-UGT, recuerda a la empresa que, en su día no se atendió a las peticiones que el delegado de prevención de este sindicato hizo a la empresa para que se distribuyesen mascarillas a los empleados y que su uso fuese generalizado, siendo también de la ultimas empresas en entregar mascarilla Fpp2 a los trabajadores, cuando ya estaba acreditado que estas eran las más eficaces para evitar contagios.
Cabe destacar que en la fábrica de ICL no se ha producido ningún contagio fruto del elevado compromiso de los trabajadores, a la hora de cumplir estrictamente con las medidas de salud frente al COVID-19.
La postura de la empresa de sancionar a estos trabajadores choca con la permisividad con la que se juzgaron acciones similares en las que estuvieron involucrados jefatura de la planta de Nomex y que este sindicato dio a conocer a la dirección de la empresa.
Entendemos que todos estos descuidos deben ser apercibidos verbalmente, con la intención de concienciar a los trabajadores, pero nunca pueden ser utilizados para perseguir y amedrentar a los mismos, dejando libres de sanción, a los que deberían ser ejemplo en el cumplimiento de las normas de seguridad.
Por todo ello la sección sindical del SOMA-FITAG-UGT, llama a la concentración a la entrada del complejo industrial, para protestar contra la actitud beligerante de la empresa hacia los trabajadores, el próximo viernes 26 de febrero.
